Instalar un aire acondicionado en una habitación requiere
de cierta planificación y preparación para asegurarse de que el sistema
funcione correctamente y provea el nivel de confort deseado. Lo primero es
determinar el tamaño apropiado del aire acondicionado basado en las dimensiones
de la habitación. Generalmente, los expertos recomiendan que la capacidad en
BTU del aparato sea de alrededor de 20 BTU por pie cuadrado. Por ejemplo, para
una habitación de 150 pies cuadrados, se necesitaría un aire acondicionado de
alrededor de 3000 BTU.
Otro factor importante es elegir la ubicación correcta y
los repuestos
de aire acondicionado necesarios tanto para la unidad interior como la
exterior. La unidad interior o el evaporador debe instalarse en una pared
interior de la habitación, preferiblemente cerca de una ventana o puerta para
facilitar la salida de los tubos de drenaje. Para la unidad exterior o
condensador, lo ideal es ubicarla en una pared exterior que dé hacia el
exterior, lejos de cualquier obstrucción que bloquee el flujo de aire.
Una vez determinado el tamaño y ubicación, el siguiente
paso es preparar la pared para la instalación. Esto implica hacer un orificio
ligeramente más grande que la unidad interior, instalando un marco de soporte y
nivelarlo correctamente. Es crucial sellar cualquier espacio entre la unidad y
la pared para evitar filtraciones de aire frío hacia el interior.
Luego se deben conectar los tubos de refrigerante entre las
unidades interior y exterior, teniendo cuidado de no doblarlos excesivamente.
Estos tubos transportan el refrigerante caliente y frío entre ambas unidades,
por lo que un buen sellado y aislamiento es esencial para la eficiencia del
sistema. Se recomienda usar tubería de cobre y aplicar aislante alrededor para
minimizar la condensación y las pérdidas de calor o frío.
Otro paso importante es conectar el cableado eléctrico,
conectando los cables de poder desde la unidad exterior hasta la interior, así
como el cable de señal para la comunicación entre ambas. Se debe usar un
circuito eléctrico dedicado con el voltaje apropiado según las especificaciones
del aparato. Un electricista calificado debe encargarse de esta parte para
garantizar un trabajo seguro y correcto.
Una vez instaladas y conectadas las unidades interior y
exterior, se debe verificar que no haya fugas en las conexiones de los tubos de
refrigerante. Esto se logra presurizando el sistema con nitrógeno y aplicando
una solución espumante para detectar burbujas. Si se encuentran fugas, estas
deben corregirse antes de continuar con los siguientes pasos.
Luego se debe hacer vacío en el sistema para extraer
cualquier humedad y cargar el refrigerante especificado por el fabricante. Esto
asegura que la cantidad precisa de refrigerante circule por el sistema para un
óptimo funcionamiento. Se utilizan bombas de vacío y medidores para llevar a
cabo este proceso.
Ya con el sistema sellado, presurizado y con la carga de
refrigerante lista, sólo resta conectar los tubos de drenaje desde la bandeja
interior hacia el exterior para remover la condensación producida, esto por supuesto
incluye la respectiva canaleta
de aire acondicionado para dejar todo en orden. Estos tubos deben tener una
ligera pendiente descendiente para facilitar el drenaje por gravedad. El
extremo exterior debe estar abierto para que gotee fuera de la vivienda.
Finalmente, se enciende el equipo para verificar su
correcto funcionamiento en los modos de enfriamiento y ventilación. Se deben
revisar cuidadosamente todos los puntos de conexión para detectar ruidos o
vibraciones anormales, así como medir el flujo de aire y la temperatura de
salida para asegurarse que se encuentren dentro de los parámetros normales. El
filtro de aire también debe estar instalado correctamente antes de utilizar el
aparato.
Instalar adecuadamente un equipo de aire acondicionado en
una habitación requiere conocimientos técnicos específicos y herramientas
apropiadas. Si no se tiene la experiencia necesaria, es altamente recomendable
contratar a un técnico calificado para que se encargue del trabajo, siguiendo
siempre las normas de seguridad y los códigos de construcción locales. Una
instalación correcta garantizará años de funcionamiento eficiente y
confortable.