
Los tapices de mandala para cubrir
camas o sofás se avienen muy bien con todo tipo de decoración, mucho más en
estos momentos en que todo vale en la decoración de interiores. El caso es dar
a conocer el carácter de cada uno.
La decoración de interiores muestra siempre el modo de
vida que se dicta desde afuera de las casas y en plena globalización, la
decoración no ha hecho más que llenarse de elementos de culturas muy distintas.
No
importa tanto la uniformización de los muebles, como pasaba hace un tiempo, lo
que importa es que estos muebles tengan carácter, ya sea por que se trata de un
diseño novedoso o es útil y funcional, pero los decoradores de interiores han
perdido sus miedos a los espacios a unos límites que se habían puesto
culturalmente unos años antes.
Ahora
se combinan muebles coloniales con los
muebles low cost de los grandes almacenes nórdicos con uno encontrado en el
Rastro o en la calle. La cuestión es marcar carácter y no renunciar a nada de
lo bello.
Vuelven a ponerse de moda los mandalas
para la decoración de espacios
Los
mandalas de tela, que a finales de los 70 formaban parte de la decoración de
las casas progres, hoy se han vuelto a poner de moda. El porque es muy fácil,
son realmente bonitos, se pueden adaptar tanto a un sofá como hacer de
cubrecama y dan un toque original y lleno de significado.
En el
mundo budista los colores de estos mandalas estampados en los tapices
decorativos, tienen un significado. El blanco tiene relación con la unificación
a través de la luz, el amarillo con la simpatía y la luminosidad, el verde con
la esperanza, la libertad y la felicidad, el gris con la sabiduría, la calma,
la neutralidad y la esperanza, el rosa con la paciencia y la dulzura, mientras
que los colores morados, que están muy
presentes en estos tapices, indican transformación, inspiración, idealismo,
espiritualidad y magia.
Además,
estos tapices son de muy bajo precio, sólo 10 euros cuesta uno de ellos, que
encima de una cama cambia todo el paisaje de la habitación, que es un modo de renovarla
sin tener que hacer obras.
Otra
imagen constante en estos tapices que se pueden ver en http://www.catayhome.es/categoria/mandalas-de-tela/
son los elefantes, una imagen que entronca totalmente con la tradición
religiosa hindú, donde los elefantes son un amuleto que surge del dios Ganesha,
el dios con cabeza de elefante símbolo de prosperidad y creatividad, entre
otros atributos. Más allá de las creencia de cada uno, estas figuras, como los
elefantes, están cargadas de inputs
positivos que de algún modo se transmitirán a nuestros hogares.

Mandala: el círculo mágico que nos
lleva al mundo espiritual y creativo
La moda
hindú es de las que más prevalecen en el mundo occidental y si hace unos años
tener uno de estos mandalas en forma de tela era sinónimo de que se había
viajado, hoy se pueden pedir sin salir de casa.
Los
mandalas son representaciones simbólicas del macrocosmos y del microcosmos que
se usan desde hace siglos en el hinduismo y en el budismo y hoy los tenemos
representados en muchos lugares. La palabra Mandala en sánscrito quiere decir
círculo y podemos traducirlo como círculo mágico o círculo sagrado; es una
representación de la unidad, de la estructura, del todo y de las partes, una
figura que escapa a su propia geometría y nos lleva directamente al mundo espiritual y creativo.
Mandalas para colorear que se colorean de dentro
hacia afuera son un ejercicio que ayuda a concentrarse en las cosas pequeñas de
la vida y abrir nuevos canales de energía, pero son muchos los que se hacen
pintar mandalas en los muros de sus paredes para contar con frescos en ellas.
El
mandala va apareciendo en todos los ámbitos de la vida donde todo tiene una
lectura circular, tanto los círculos naturales, del sol y la luna como los
círculos afectivos, la familia, los amigos, los ciclos vitales y demás. Así que
seguro que sobre una cama, quedará de lo más bonito.